Alrededor de cuatro millones de contenedores por año llegan a Europa a través de la red de puertos de Holanda y Bélgica. Aproximadamente el 12 % de estos contenedores contienen gases y vapores que superan los límites reglamentarios. Gracias a algunas iniciativas de EWS, hemos estado observando una disminución de este porcentaje. Esta es una consecuencia directa del trabajo en común de los que reciben grandes cantidades de contenedores de carga, de los cuales EWS investigó la fuente de contaminación.
Los países productores reciben información específica acerca de qué medidas pueden tomar para garantizar que en Europa se reciban contenedores en los que se pueda acceder con seguridad. EWS considera que se debe resolver el problema y ofrece a sus clientes información detallada y transparente. En el caso del flujo de productos en el que no se pueden resolver los riesgos, por ejemplo, por propiedades específicas del producto, EWS puede confeccionar un protocolo para garantizar el tratamiento sin riesgos de las mercancías.
A consequencia se produce un resultado positivo en la que todos salen favorecidos y que permite ahorrar costos y especialmente garantizar la seguridad de los colaboradores.